Todas las palabras que palpitan en mí se niegan a salir,
sofocando el grito cálido de mis frases de amor.
No es vacío, no es indiferencia ante este sol otoñal,
es sólo que no saben que camino han de tomar.
Pero están en mí, latiendo, quemando cada día más
y hoy envuelven mis días de luna lejana.
No pretendo despotricar insultos
ni acuchillar las oleadas de recuerdos,
sólo he de dejarlas en plena libertad,
sin encadenarlas a nada ni nadie.
Creo que esa es la manera para que decidan salir,
sintiéndose plenamente libres de volar.
Mientras tantos he de aprender a esperar
sin que me importe si el tiempo me viene a matar.
sofocando el grito cálido de mis frases de amor.
No es vacío, no es indiferencia ante este sol otoñal,
es sólo que no saben que camino han de tomar.
Pero están en mí, latiendo, quemando cada día más
y hoy envuelven mis días de luna lejana.
No pretendo despotricar insultos
ni acuchillar las oleadas de recuerdos,
sólo he de dejarlas en plena libertad,
sin encadenarlas a nada ni nadie.
Creo que esa es la manera para que decidan salir,
sintiéndose plenamente libres de volar.
Mientras tantos he de aprender a esperar
sin que me importe si el tiempo me viene a matar.
1 comentario:
Muy hermosas palabras.
Y que mejor forma de invitarlas a volar que en un horizonte de libertad. Ese final me ha dejado reflexionando, es buenísimo!
Un abrazo muy grande!.
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